ZONA DE TRANSGRESIÓN

Un espacio en el que opinar con total libertad, en ocasiones con cierta ironía, pero con respeto.

25 enero, 2007

CONSECUENTES CON LA DISCRECIÓN

La Audiencia Nacional ha decidido que el terrorista De Juana continúe en la misma situación, en prisión, a la espera de que el Tribunal Supremo resuelva el recurso que presentó contra la sentencia que le condena a doce años de cárcel. El acuerdo se ha tomado por doce votos contra cuatro.
Aunque cabe recurso de súplica, sería aconsejable que se acatara, respetara y no criticara la actuación de la Audiencia, por el deseo de rebajar la tensión entorno al tema de la lucha contra el terrorismo. De momento no está siendo del todo así y me temo que no será así en los próximos días.
En este sentido parece necesario que también sea el Sr. Presidente del Gobierno quien deje de hablar sobre la cuestión antiterrorista, porque, al no poder concretar nada, lo único que consigue es alentar todo tipo que interpretaciones, corriendo el riesgo de generar más crispación y malestar. Por ello, me sorprende que, aún después del debate del día quince, continúe haciendo comentarios al respecto, como los que hizo el pasado día diecisiete en el Forum Europa, o las realizadas ayer mismo en un coloquio con el Sr. Garzón en la Casa de América.
El Camino parece que está, de momento, claro: diálogo entre los partidos democráticos, presión sobre el entorno social que apoya al terrorismo para que se desmarque de él y lo condenen, firmeza a la hora de aplicar las leyes, más colaboración con Francia y presión policial contra los violentos y los terroristas.
En el futuro se verá si la banda vuelve a mover ficha, justo en sentido contrario a como la movió el pasado día treinta de diciembre, para que, sólo en ese caso, se introduzca alguna otra variable en la metodología de la lucha contra el terror.
En ese marco, el único que puede poner cierta sensatez en el debate político, hay que encuadrar la detención de oto miembro de la banda terrorista, después de que hubiera cruzado la frontera con Francia, y la actuación del juez de la Audiencia Nacional, Sr. Garzón, prohibiendo las movilizaciones previstas en el País Vasco y Navarra como protesta por la sentencia del Tribunal Supremo contra el colectivo juvenil Jarrai y a sus sucesoras Haika y Segi.